Artículos de El Plural

EL SEÑOR DEL LADRILLO CONSORTE DE COSPEDAL

Ignacio López del Hierro es un hombre feliz. No llevaba bien la discreción de su relación con María Dolores de Cospedal, la número dos del PP, y hacía tiempo que venía pidiendo la formalización de la misma para acallar los rumores que circulaban por Madrid.

Ayer, por fin, Ignacio López del Hierro y Bravo, uno de los señores del ladrillo surgidos al albur del boom inmobiliario y alter ego de Joaquín Rivero (Gecina, Bami NewCo y en su día factótum de Metrovacesa), contrajo matrimonio con la secretaria general de los populares en el Ayuntamiento de Toledo.

Es el segundo enlace para este alto ejecutivo sevillano de 62 años. Antes estuvo casado con Inés D´Aubarède Paya, miembro de la Asociación Española de Bridge, con la que tuvo tres hijos, Helena, Ignacio y Rodrigo. Ahora es un padre también para Ricardo, de tres años, que María Dolores de Cospedal, de 43 años, tuvo por fecundación in vitro.

Ignacio López del Hierro y Bravo comenzó su carrera profesional en la política pura y dura. Fue nombrado gobernador civil de Toledo en el 77, con tan solo 29 años, siendo el más joven de la historia. Desempeñó el mismo cargo en Sevilla para derivar, años después, en una inteligente y fructuosa combinación de política y negocios. Se le dan bien, sobre todo, los inmobiliarios.

Buen negociador y mejor relaciones públicas, Del Hierro ha sido consejero de Metrovacesa y vicepresidente de la constructora Bami, a las órdenes de Joaquín Rivero. También se ha sentado en el consejo de la Corporación Industrial de Caja Castilla La Mancha. Actualmente es consejero de Gecina, Bami NewCo, del banco norteamericano Lincoln International y de Avanzit. Según La otra Crónica, entre todas sus ocupaciones podría sumar más de un millón de euros al año.

Es primo hermano por parte materna de José María Álvarez del Manzano, ex alcalde de Madrid. y ha mantenido ‘amistades peligrosas’ con el yerno de José María Aznar, el ‘conseguidor’, Alejandro Agag, del que no guarda buen recuerdo por su papel en la OPA del italiano Caltagirone sobre Metrovacesa, entonces comandada por Rivero.

La boda fue discreta y contó con la presencia de un puñado de invitados, como el presidente del PP, Mariano Rajoy, y algunos de los socios de López del Hierro, caso de Del Rivero y de Bautista Soler. La celebración puso negro sobre blanco a una relación que duraba años y que la pareja había mantenido en secreto hasta ahora.